¿Por qué tengo que pagar por lo que como arrendador no voy a utilizar?
Paga solo por lo necesario, creando una póliza a tu medida y ahorrando en la prima que pagas sin renunciar a la máxima protección.
Coberturas incluidas:
No tendrás que preocuparte por nada, nos hacemos cargo de los daños y pérdidas producidos por:
- La responsabilidad civil.
- Incendio, humo, explosión y caída de rayo.
- Consecuencias de efectos meteorológicos como lluvia, viento, granizo, nieve, inundaciones, limpieza de barro y extracción de lodos.
- Daños por agua, incluida la localización y su reparación.
- Actos vandálicos o malintencionados no producidos por el inquilino.
- Daños eléctricos en la vivienda.
- Roturas de placas vitrocerámicas, aparatos sanitarios o cristales.
- Robo y hurto en la vivienda.
- Servicio de bricolaje "Manitas" que podrá aprovechar tu inquilino para pequeñas reparaciones del hogar.
Coberturas específicas para el arrendador que están incluidas:
La pérdida de los alquileres por inhabitabilidad de la vivienda.
Gastos de traslado y estancia en guardamuebles o similar, del mobiliario asegurado salvado.
Defensa jurídica del arrendador que incluye reclamaciones y asesoramiento frente a:
Al contrato de arrendamiento.
Rentas impagadas.
Desahucio por obras no consentidas o falta de pago.
Defensa de posibles responsabilidades penales.
Coberturas opcionales:
Además, puedes personalizar la protección contratando de forma opcional:
Cobertura frente al arrendatario por:
Robo de continente a primer riesgo.
Daños estéticos.
Soporte de equipos informáticos.
Rotura y avería de equipos informáticos.
Bienes refrigerados.
Trasteros.
Arboleda y jardines.
Ruina total de la vivienda asegurada por obras de terceros.